En primer lugar, es un excelente indicador de un estado general de salud general individual. En segundo lugar, conocer nuestra edad biológica nos permite obtener una mejor comprensión de los hábitos de estilo de vida que afectan el envejecimiento y nos brinda la oportunidad de realizar los cambios apropiados y, mediante pruebas periódicas, medir los resultados. En tercer lugar, la tecnología de análisis de telómeros (TAT) de Life Length permitirá una medicina más personalizada a medida que los médicos traten a los pacientes considerando cada vez más su edad biológica.